Las 5 tapas típicas españolas imprescindibles para un local de tapeo
¿A quién no le gusta ir de tapas con la familia o con los amigos? El tapeo es una actividad que casi está considerada como un arte. Tanto es así que se trata de uno de los grandes alicientes gastronómicos que muchos turistas extranjeros vienen buscando. Un bar o un restaurante que cuente con algunas de las mejores tapas típicas españolas es sinónimo de éxito.
La lista de tapas en nuestro país es prácticamente infinita. Cada lugar tiene su propia especialidad, que se acompaña de tapas de creación única y otras mucho más tradicionales. La oferta es muy variada, contando con productos de todo tipo con los que dar rienda suelta a la imaginación en materia gastronómica.
Tapas típicas españolas
Los bares de nuestro país suelen contar con una carta de tapas muy variada. Están aquellos que optan por productos de la zona para crear tapas locales, mientras que otros prefieren mostrar un abanico más amplio. Lo que sí es cierto es que no hay nada como salir a tapear y pedir unas tapas típicas de toda la vida.
Tortilla española o de patatas
La tortilla de patatas es, sin duda, una de las tapas españolas más tradicionales en cualquier bar. La clásica es la que se elabora con huevo y patatas, aunque puede llevar también cebolla, chorizo, espinacas, etc. Todo dependerá del gusto de quien la haga y, por supuesto, del consumidor.
El origen de la tortilla como una de las tapas típicas españolas es variado, ya que hay numerosas historias y leyendas al respecto. Una de las más reconocidas nos lleva hasta el pueblo pacense de Villanueva de la Serena. Allí, el economista José Tena Godoy, publicó en 1798 una receta con patata cocida, harina de trigo, agua, sal y levadura parecida a la tortilla que conocemos hoy.
Patatas bravas
Las patatas bravas son patatas cortadas en dados grandes, fritas en aceite de oliva y acompañadas, generalmente, con salsa picante. También pueden prepararse cocidas en agua, en aceite o en el horno. Una de esas tapas que debes acompañar siempre de una bebida para calmar el picante.
En este caso, el origen de las patatas bravas como una de las tapas típicas españolas tampoco está demasiado claro. No obstante, todo apunta a que fue creada en Madrid en la década de los 60 del siglo pasado y, más concretamente, en dos establecimientos ya desaparecidos: Casa Pellico y La Casona.
Ensaladilla rusa
La ensaladilla rusa es uno de los platos más habituales dentro de nuestra gastronomía. Una ensalada de patatas, guisantes, zanahoria y huevo cocido. Ingredientes todos ellos que se mezclan con atún y otros para servir fría y con mahonesa. No obstante, las variedades de esta tapa son muchas y muy numerosas.
Tal y como su nombre indica, el origen de esta ensaladilla está en territorio ruso. Sin embargo, su artífice y creador fue el chef francés Lucien Olivier, quien montó un restaurante de alta cocina en Rusia. Fue allí donde dió a conocer este plato, hoy una de las tapas típicas españolas, y que muy pronto se convirtió en uno de los más populares en su carta.
Croquetas
Las croquetas son una porción de masa de forma redonda u ovalada. Pueden estar rellenas de queso, jamón, verduras, carne, pescado, etc. Su origen es francés y tiene a Louis de Bechamel, encargado de cocina del rey Luis XIV, a su creador allá por el siglo XVII. Aunque no sería sino hasta principios del XIX cuando el cocinero Antoine Camere creara las croquetas tal y como las conocemos hoy.
Calamares a la romana
Se habla de los calamares a la romana como una de las tapas o entrantes más habituales de cualquier cocina. Estos calamares, con su característico color dorado gracias a la fritura, se suelen acompañar de limón o a veces de salsas como el alioli o la salsa tártara. Se asegura que la temperatura del aceite es clave para que salgan a la perfección.