Cómo confeccionar un menú macrobiótico
La dieta macrobiótica es un plan de alimentación predominantemente vegetariano que busca mejorar la salud. Se enfoca en granos enteros, legumbres y verduras. No solo se usa para mejorar la salud física, sino que también se dice que mejora la salud espiritual y tiene un impacto positivo en el medio ambiente. Si está buscando ofrecer este tipo de comida en su restaurante, le dejamos esta sugerencia de menú macrobiótico.
Sopa de miso con tofu cortado en cubitos
Una cálida, reconfortante y sabrosa sopa con pequeños bocados de tofu en cada cucharada. Para su elaboración, se necesita caldo de verduras, 3-4 cucharadas de pasta de miso, acelgas verdes, cebolla picada y una taza de tofu en cubos.
El primer paso es colocar el caldo de verduras en una olla mediana y cocinar a fuego lento. Mientras tanto, coloque el miso en un tazón pequeño, agregue un poco de agua caliente y bata hasta que quede suave. Luego, agregue a la olla la acelga verde, la cebolla y el tofu y cocine durante 5 minutos. Por último, retire del fuego y añada la mezcla de miso, revolviendo para combinar.
Bolas fritas de arroz y guisantes
El primer paso es preparar el arroz, a su gusto. Sin embargo, para esta receta en concreto, lo ideal es que quede al dente. Una vez lo retire del fuego, añada un poco de parmesano y sal. Cuando se enfríe, agregue un huevo batido y revuelva vigorosamente, para que el huevo se esparza por toda la mezcla. Luego, extienda el arroz en una bandeja para hornear y deje enfriar por completo.
A continuación, caliente aceite de oliva en una sartén mediana. Agregue tomates, guisantes, perejil y queso parmesano (con sal al gusto). Una vez cocinada la mezcla, toca armar las bolas. Para ello, con las manos mojadas, tome aproximadamente 3 cucharadas de arroz y forme una bola sin aire. Luego, haga un pequeño agujero en el medio y coloque todo el relleno que quepa, cubriendo con un par de cubos de mozzarella. Para cerrarla, coja otro poco arroz. Por último, sumerja las bolas en harina, huevo y pan rallado (por ese orden) y fría las bolas en una cacerola con bastante fondo a fuego alto.
Quinoa con nueces y ensalada
Los ingredientes son bastante sencillos y, al igual que para los otros platos de tu menú macrobiótico, puedes comprarlos en Cash IFA.
Comience cocinando la quinoa. La clave del éxito reside en elegir una proporción ideal: 1 taza de quinoa por cada ½ de líquido. Simplemente combine el agua, la sal y la quinoa en una olla y hierva. Baje el fuego a lento, cubra y cocine hasta que la quinua esté lista, unos 15 minutos.
Mientras se cocina la quinoa, prepare las verduras. A los pepinos le puede quitar la piel o no. El pimiento, córtelo en trozos pequeños, la cebolleta en rodajas finas y la zanahoria rállela. Luego, prepare el aderezo combinando el zumo de lima fresco con azúcar, aceite vegetal rojo y caldo de pescado en un tazón pequeño. Bata hasta que el azúcar se disuelva. Combine la quinoa con el aderezo, las verduras y las hierbas frescas y ¡listo!