Menú de restaurante vegetariano – Claves para prepararlo

Por: Cashifa

Fecha: enero 28, 2019

Categoría: Menús para restaurantes baratos y diarios

La popularidad de los alimentos orgánicos y los restaurantes que los sirven se ha disparado en los últimos años. Un mercado que antes era nicho ahora es una floreciente industria. Aunque la demanda está creciendo, administrar un menú de restaurante vegetariano no es fácil.

Los alimentos orgánicos son intrínsecamente más caros y a menudo escasos. Pero también el precio de venta de estos platos es superior, y sus consumidores están totalmente dispuestos a abonar esas cantidades. En cuanto a los productos, en Cash IFA somos proveedores con un gran abanico de ingredientes. ¿Qué claves son importantes en un menú vegetariano exitoso?

Construir una comida equilibrada

Combinar proteínas y fibra en las comidas ayudará a sus clientes a sentirte satisfechos. Un tazón de arroz con garbanzos y verduras, por ejemplo, ofrece tanto proteínas como fibra.

Asado lento, una de las mejores formas de cocinar comida vegetariana

Cuando se asa lentamente los alimentos, se elimina la cantidad de agua que contienen. Esto intensifica el sabor y hace que la textura sea masticable. La carne cocida contiene aproximadamente 55-65% de agua. Muy poco comparado con el 80-95% de las verduras. Casi todos los ingredientes de una comida vegetariana se pueden hacer en parrilla.

Agregue alimentos masticables

Los alimentos masticables como el tofu chamuscado, los champiñones a la parrilla y las nueces sacian más, porque requieren más tiempo y esfuerzo para comer que, por ejemplo, una cucharada de caldo. Esto los convierte en una sustitución más satisfactoria.

Incluya ingredientes de Umami

La palabra umami, traducida aproximadamente como «delicioso», fue acuñada por un científico japonés que descubrió este quinto sabor. Encontró que el glutamato en los alimentos puede ser detectado por los seres humanos. Este da a los alimentos un atractivo que no es ni dulce ni salado, ni agrio ni amargo (los otros cuatro sabores).

La mayoría de las personas conocen el glutamato monosódico, el potenciador del sabor asociado con la comida de los restaurantes chinos. Pero también es un compuesto natural y seguro que se encuentra en la carne, así como en muchos otros alimentos. El proceso de fermentación mejora el umami, lo que explica por qué la salsa de soja y los quesos añejos como el parmesano son tan «sabrosos».

Las verduras ricas en umami incluyen espárragos, tomates, algas, guisantes, maíz y cebollas. Los alimentos de soya, incluidos el tofu y el edamame, y algas como dulse o arame también son buenos lugares para encontrar umami.

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Combine sabores y texturas

Excite el paladar mezclando texturas y sabores. Un buen ejemplo serían unos ñoquis cremosos de ricota, complementados con verduras de primavera crujientes. Ningún componente individual es tan satisfactorio como la combinación.